El hijo del legendario piloto apunta al gran circo en 2021, la siguiente temporada en F2 será decisiva
Mientras que la situación del laureado Michael Schumacher se mantiene hermética, su apellido se mantiene presente en el paddock de la Fórmula 1 con su hijo Mick. La histórica manager del káiser, Sabine Kehm, se ha hecho cargo personalmente de la carrera del joven Schumacher, de tan solo 20 años y estuvo presente en la primera prueba oficial del joven en un monoplaza F1, al volante del Ferrari SF90, en el circuito de Bahréin.
Mick logró debutar este año en la F2, con una victoria en Hungaroring y un lugar 12 general. Quien es piloto de la academia de Ferrari ha conseguido buenos dividendos en la F4 italiana y alemana, además de un título de F3, pero que no han sido suficientes para la superlicencia de F1, que espera conseguir durante la próxima temporada en F2. Le bastaría con un top-10 durante 2020 y se antoja posible puesto que se encuentra en la escudería Prema, punteros del campeonato.
Las posibilidades de que llegue a la F son muy reales, pues hay muchas personas respaldando la carrera del joven y trabajando para que esto sea posible, además del hecho que pocos jóvenes pilotos tienen más experiencia que el heredero de la dinastía Schumacher. Esto sumado a que los del Cavallino Rampante guardan un asiento para el en Alfa RomeoSauber. Si su 2020 es satisfactorio, el ascenso soñado puede llegar en 2021, porque Raikkonen y Giovinazzi acaban su contrato y es complicado que ambos continúen.