En un giro inesperado en la competencia celebrada el pasado sábado en el Memorial Coliseum, Daniel Suárez, piloto de Quaker State, se convirtió en el protagonista indiscutible al cerrar con broche de oro la jornada de NASCAR México, dejando una marca imborrable en el icónico recinto de Los Ángeles.
A pesar del cambio de planes que llevó a NASCAR México a cerrar el programa en lugar de abrirlo como se había previsto, la emoción y la calidad del espectáculo no se vieron afectadas. Suárez, quien no pudo participar en la NASCAR Cup al no calificar, se tomó la revancha en la competencia mexicana, arrancando desde la tercera posición y llevándose la victoria que fue recibida con ovaciones por los latinos presentes en el Coliseo.
Tengo un sabor agridulce por lo que me pasó en NASCAR Cup, pero estoy feliz de haber cruzado la meta primero en esta carrera. Apreté al final y faltando unas 20 vueltas sabía que si no cometía ningún error, iba a llevarme la victoria”, expresó Suárez, destacando su determinación y habilidad en la pista.
La competencia, que resultó ser la mejor desde el regreso de NASCAR México, también vio destacadas actuaciones de otros talentosos pilotos. Santiago Tovar de Canel´s se posicionó en la segunda posición, comentando la importancia de estar entre los mejores en un lugar tan emblemático como el Memorial Coliseo.
El campeón de NASCAR Challenge, el potosino Alejandro de Alba de Alessandros, logró ubicarse en la tercera posición después de una intensa bandera amarilla. Abraham Calderón de Commscope-Telcel y Rubén García Jr. de Canel´s, quienes lideraron la competencia en ciertos momentos, perdieron la oportunidad de triunfar debido a incidentes que los llevaron a los pits.
A pesar del cambio de fecha por las condiciones climáticas, el Memorial Coliseum se estuvo con una cantidad considerable de público que vibró con la emoción de la carrera. El podio de NASCAR México fue acompañado por música mexicana, provocando aplausos y agradecimientos de Daniel Suárez hacia los compatriotas que se hicieron presentes en el Coliseo.